En nuestro afán por ser más sostenibles, la humanidad se ha dado cuenta que algunas costumbres del pasado son mucho más favorables al medio ambiente que hábitos actuales. Utilizar ropa de segunda mano o rellenar los envases no es nada nuevo. Nuestros abuelos ya lo hacían hace mucho tiempo atrás. Al igual que utilizar pastillas de jabón para la higiene personal, no solo para las manos.
Desde hace algún tiempo parece que el mundo ha redescubierto las ventajas de esos jabones sólidos que encandilaron a nuestras abuelas. Sus envases son más sostenibles, son más duraderos y su eficacia es igual, e incluso mejor, que algunos geles y champús. En este nuevo boom de jabones en pastilla, las marcas de lujo no quieren quedarse atrás. Para muestra, los presentados por Loewe, como parte de su colección Home Scents.
Se trata de tres jabones sólidos, con una estética vintage, disponibles en tres fragancias muy originales: orégano, esencia de marihuana y regaliz.
Están inspirados en la Antigua Grecia y Roma, donde integraban esencias botánicas y terapéuticas en sus rituales de baño. Con ingredientes con propiedades nutritivas, como el alga roja o la manteca de karité. Mientras la primera combate la inflamación de la piel, la sequedad y las arrugas, gracias a su riqueza en antioxidantes, vitaminas y minerales, la segunda es un elemento profundamente hidratante, que nutre y calma la piel.
Los tres nuevos jabones sólidos de Loewe, de 290 gramos, tienen un diseño ergonómico, con el nombre de la marca gravado en la pastilla y con una cuerda de lino prelavada 100% natural, insertada en un extremo, para facilitar la sujeción y aplicación por todo el cuerpo. Bonitos, simples y elegantes, es posible que le dé pena utilizarlos y decida colocarlos en su baño a modo de decoración.
Respecto a sus fragancias, la originalidad de las esencias utilizadas, enamoran a cualquiera. El jabón sólido Orégano recuerda a un jardín de hierbas mediterráneo, al tiempo que aporta una sensación de suavidad y frescura en la piel. Al igual que el jabón sólido Liquorice, perfumado con esencia dulce y amaderada de regaliz.
El tercer aroma, igual de sorprendente, es el de Marihuana. Pero no se asuste, ningún material de la planta de la Marihuana o Cannabis ha sido empleado para su creación. Se ha realizado a través de un aroma sintético que recuerda a esta fragancia.
Su packaging, al igual que el resto de la colección Home Scents, refleja en su envoltorio lo que se encontrará en su interior, con ilustraciones de la planta que aporta la fragancia elegida sobre un fondo liso de color.
Por aquellos que todavía no han sucumbido a la moda de los jabones sólidos, las tres fragancias de Loewe también están disponibles en versión líquida. Con la misma olor, pero sin el encanto de su estética vintage que nos recuerda tanto a nuestras abuelas.
© Imágenes Loewe
