Si alguna vez ha visitado Londres, seguro que ha fantaseado con vivir una temporada en esta ciudad. Tiene algo que atrae. Quizás su historia, quizás su gran oferta cultural, los negocios o incluso las compras son una buena razón para quedarse.
Si ya es uno de los afortunados que ha conseguido su sueño de vivir en Londres, no debe perder de vista un nuevo complejo residencial en la renovada zona de Nine Elms. Se trata de Embassy Gardens, un lujoso complejo de apartamentos que cuenta con todos los servicios que uno puede imaginar y alguno más que le sorprenderá.
Situado a orillas del Támesis, Embassy Gardens es uno de los muchos proyectos que se están desarrollando en la zona de Nine Elms, desde que la Embajada de EE.UU o Apple decidieron trasladarse aquí. Una zona con mucho auge. Con una rica combinación de restaurantes, bares, tiendas, negocios y zonas verdes que lo postulan como el nuevo barrio de moda en Londres.
En esta nueva zona tan privilegiada, Embassy Gardens ofrece apartamentos de lujo de 1 y 2 habitaciones. En un edificio diseñado por el arquitecto británico HAL Architects. Donde el uso de la luz natural y sus espectaculares vistas son solo una parte de su espectacularidad.
Cada apartamento cuenta con un amplio balcón privado, ampliado a una gran terraza en el caso de los áticos que coronan el edificio. Los accesorios y diseños interiores, realizados por el dúo Benninger Lloyds, están inspirados en la artesanía del siglo XXi y en los colores vivos del mercado de flores del New Covent Garden, cercano al lugar.
Cuentan con hermosas cocinas contemporáneas y funcionales. Baños de mármol con azulejos realizados a mano. Decoración lujosa en cada uno de sus rincones. E internet de alta velocidad y multitud de puertos USB para poder trabajar desde casa, si uno lo desea.
Pero además de unos apartamentos maravillosos, Embassy Gardens ofrece a sus inquilinos una serie de servicios que le proporcionarán todo lo que deseen sin salir del complejo. Desde el cine privado Maureen O’Hara o el Belmont Gym, perfectos para su tiempo libre. Hasta el salón Beckett o la Suite Edison, donde realizar reuniones de trabajo o socializar.
Pero, sin duda, lo que más llama la atención de Embassy Gardens es su espectacular piscina en la azotea. No es una piscina más. Se trata de una obra de ingeniería en la que la piscina se encuentra suspendida en el aire, a 35 metros de altura, uniendo dos edificios. Una estructura de 25 metros de largo, de acrílico transparente, que permite a los nadadores ver lo que ocurre en la calle bajo a sus pies, y a los transeúntes de abajo morirse de envidia por los afortunados que están nadando sobre ellos. Además, a través de esta piscina los inquilinos podrán pasar de un edificio a otro, tan solo nadando sus 25 metros.
La idea de la Sky Pool, como así se llama está increíble estructura, surgió cuando se proyectaba Embassy Gardens. Se valoró como la mejor solución para situar una piscina de ese tamaño. Es única en el mundo y aseguramos que no es apta para los que tienen miedo a las alturas. Eso sí, solo podrán probarla lo residentes de Embassy Gardens y sus exquisitos invitados.
© Imágenes Embassy Gardens
