Aprovechando el parón de turismo provocado por el coronavirus, muchas han sido las firmas que han optado por iniciar nuevos proyectos o remodelar sus instalaciones. Si hace unas semanas era Dior quien inauguraba su remodelada tienda de la Avenue Montaigne. Este fin de semana ha sido Loewe quien ha abierto las puertas de su nueva tienda en Barcelona.
Situada en el Paseo de Gracia de la Ciudad Condal, la tienda de Loewe se encuentra ubicada en un exquisito edificio modernista de Doménech i Montaner, cuya fachada irradia una belleza única que presagia lo que uno encontrará en su interior.
Uno podría pensar que se trata de una reforma más. De un lavado de cara para actualizar sus interiores y darle un toque más moderno. Sin embargo, la reforma de Loewe ha querido dar un paso más, redefiniendo esta flagship como un punto de encuentro entre artesanía, arte y diseño. Un concepto Casa Loewe, semejante al que ya tenía la tienda insignia de la calle Serrano de Madrid. Que encaja a la perfección con el ADN de esta firma amante de la artesanía y el diseño.
Con una superficie de 512 metros cuadrados, Casa Loewe Barcelona recoge las últimas colecciones de la firma, junto a una selección comisariada de obras de arte e instalaciones. Como la escultura a gran escala construida a partir de bambú del artista japonés Tanabe Chikuunsai. Un artista que utiliza un bisturí para dividir el bambú indígena de una zona específica de Japón y lo divide en tiras de diferentes tamaños para luego tejerlos hasta crear preciosas esculturas. Unas obras que siguen prácticas eco-sostenibles, ya que finalizada su exposición, recupera el bambú para reutilizarlo en otros proyectos.
Otra de las obras de la nueva Casa Loewe Barcelona es la instalación de macramé “Cometa Anclado”. Una obra de 1974 de la artista catalana Aurelia Muñoz. En ella, las cuerdas de nailon y algodón están atadas en una técnica de macramé para formar una composición abstracta de tensión y textura.
Estas dos grandes piezas principales están acompañadas de otras obras de arte. Como ocho cerámicas de Picasso, una vidriera del artista Richard Wright o un biombo decorativo de cuatro paneles de Marc Camille Chaimowicz. Junto a las que se han colocado muebles de diseño contemporáneo, que conviven en perfecta armonía con otras piezas más antiguas.
Una combinación antigua y moderna que refleja el amor de Loewe por el diseño y el arte. Durante la remodelación se descubrieron techos altos con intrincados detalles en pan de oro que ahora contrastan con los suelos de hormigón, con una pared de azulejos en tonos blanco y azul y con columnas vestidas de cerámica creada por los artesanos de Cerámica Cumella.
Sin duda, un nuevo punto de encuentro de la moda, el arte y el diseño salido de la mente de Jonathan Anderson, director creativo de Loewe. Un espacio que albergará las últimas colecciones de la firma española, junto con las obras de arte que forman parte de la colección de la marca e instalaciones creadas en exclusiva para este nuevo espacio.
© Imágenes Casa Loewe
