La artesanía ha estado ligada al lujo desde su acuñación. El ‘hecho a mano’ es una de las condiciones esenciales para que algo sea exclusivo y único. Sin embargo, hasta hace poco ésta era solo una de las característica más de la definición. Por suerte, de un tiempo a esta parte, el valor de lo artesanal ha ido in crescendo, hasta el punto de afirmar que la artesanía es el nuevo lujo.
Firmas como Louis Vuitton, Hermès o Loewe hace tiempo que saben de la importancia de lo artesanal en cada una de sus creaciones. El trabajo de sus artesanos es primordial para que sus piezas sean excepcionales. De ahí que estas firmas se hayan afanado en promover sus cualidades artesanas con iniciativas en favor de esta disciplina.
Así, por ejemplo, no es de extrañar que a finales del año pasado Hermès, viendo la falta de profesionales del sector, abriera la École Hermès des Savoir-faire, dedicada a la formación de los futuros artesanos de marroquinería. O que abriera dos nuevos talleres y tenga previsto abrir otros dos para el año 2026, previniendo el auge del sector.
La puesta en valor de lo artesanal también es el contenido del nuevo libro Louis Vuitton Manufactures. Un libro, publicado por Assouline y escrito por el historiador y periodista Nicholas Foulkes, que presenta los talleres de la Maison y a los artesonas que crean sus magníficas piezas.
Louis Vuitton Manufactures refleja la idea defendida por la firma francesa de que las instalaciones dedicadas a la manufactura de sus productos son lugares donde aprender, respetar y transmitir las habilidades artesanales tradicionales, mediante el uso de técnicas y herramientas ancestrales, usadas por el propio Louis Vuitton en sus inicios. En 400 páginas y con cerca de 350 ilustraciones, este volumen muestra los emplazamientos donde se elaboran los artículos de marroquinería, perfumes, relojes, zapatos, piezas de alta joyería y ropa de Louis Vuitton, presentando también a los artesanos, artífices de estas creaciones.
La firma española Loewe, a través de su fundación, promueve cada año el Premio de Artesanía, en el que artistas y creadores de todas las disciplinas participan para obtener un premio en metálico y la exposición de su obra en Loewe Fondation Craft Prize.
Hermès, Louis Vuitton o Loewe son solo tres ejemplos del valor de la artesanía en el mundo del lujo. Una disciplina cuyo trabajo no siempre ha sido valorado como se merece. Cada vez hay más falta de artesanos. Es un trabajo que, a priori, no gusta a los jóvenes. Por lo que si realmente el camino del lujo ha de pasar por él, es imprescindible llamar su atención.
Iniciativas como la escuela de Hermès, el libro de Louis Vuitton o el premio de Loewe pueden ayudar a aupar a la artesanía al lugar que se merece. Para poder afirmar con más rotundidad que nunca, que la artesanía es el nuevo lujo y hay suficientes artesanos para desarrollarla.
En Francia son más conscientes de ello que en otros países. Su savoir-faire les avala. Así como iniciativas como la plataforma Savoir pour Faire, donde se promueve el saber único del sector de la moda y el lujo francés con 80 profesiones técnicas, 250 cursos de formación y ofertas de trabajo dirigidas a ayudar a estudiantes a encontrar su camino en el mundo de la moda, el lujo y la artesanía.
El resto de países debería tomar ejemplo y apostar por sus productos artesanos. En España, a pesar de algunas iniciativas como las de Loewe, todavía está lejos de valorar a sus artesanos. Esa guitarra española hecha a mano o el cristal soplado de Mallorca. Esa cerámica de Sargadelos o las espadas toledanas, son solo algunos ejemplos de la gran artesanía tradicional del país, poco valorada hasta la fecha.
© Imágenes Assouline; Hermès; Savoir pour Faire
MARTA PARAREDA
"Periodista, especializada en Comunicación de Moda. Tras pasar por varios medios de comunicación desembarqué en el sector del lujo y rápidamente me cautivó. Mi mayor logro sería que los lectores disfrutaran tanto leyendo como yo lo hago escribiendo"