Todas las firmas de lujo con cierta edad tienen un producto icónico que es fácilmente reconocible. Una pieza que va asociada intrínsecamente a la marca que se convierte en otro de sus valores comunicativos, como ya lo son su logo, su nombre o en ocasiones, ciertos colores. Objetos que han pasado a la historia por ser especiales. Tanto por su diseño, como por su innovación, como por su buena acogida por parte de los cliente a lo largo de muchos años. Deambulando como el primer día de generación en generación.
Si hablamos de la colección de joyas Trinity, se relaciona rápidamente con Cartier. Quizás su nombre no le diga nada, pero al verla, la reconocerá fácilmente. Su pieza más reconocible es su anillo, formado por tres aros, de tres tipos de oro diferentes, que se entrelazan. Una pieza que este año cumple su centenario.
Símbolo de amor, unidad y diversidad, el anillo Trinity fue creado en 1924 por el maestro joyero Louis Cartier. Pero no fue idea suya. Su amigo, el poeta y dramaturgo francés Jean Cocteau tuvo un sueño en el que intervenía Saturno y sus anillos. Un sueño que Cartier le ayudó a plasmar en una joya. Cocteau lo pensó y Cartier lo creó. El resultado fue un anillo nunca antes visto, formado por tres aros de diferentes colores con gran simbología.
El anillo quiso representar tres sentimientos. El amor, representado por el aro de oro rosa. La fidelidad, representada por el aro de oro amarillo. Y la amistad, de oro blanco. Unos sentimientos que a la vez están entrelazados como símbolo de unidad y de infinidad de vínculos entre las personas.
Pero más allá de la simbología representada, el anillo Trinity resultó diferente porque, más que una joya, es una escultura. No representa ni lo femenino, ni lo masculino. A lo largo de sus 100 años de vida, lo han llevado tanto hombres, como mujeres. Es una pieza emocional, por lo que representa, pero al tiempo es extravagante, por su diseño. Quizás por ello, ha sabido perdurar en el tiempo con la misma fuerza que el primer día.
A lo largo de sus 100 años de vida, el anillo Trinity, cuyo nombre no fue acuñado hasta 1998, también se ha reinventado en pulseras, collares, brazaletes, pendientes y colgantes. Ha tenido diversas versiones. Se le han añadido diamantes…. Pero siempre ha sabido mantener su esencia.
Ahora, para celebrar su centenario, Cartier ha ideado dos nuevos diseños, tan sencillos y depurados como creativos. Así como una reedición de su pulsera XL y una versión también XL del emblemático anillo.
La celebración del aniversario también ha venido acompañada por tres grandes eventos en las tres ciudades en las que los hermanos Cartier, Louis, Pierre y Jacques, decidieron establecerse durante el siglo pasado. Tres extraordinarias fiestas, a la que han acudido muchos rostros conocidos, celebradas en la Rue de la Paix en París, la Quinta Avenida de Nueva York y New Bond Street en Londres.
© Imágenes Cartier
MARTA PARAREDA
"Periodista, especializada en Comunicación de Moda. Tras pasar por varios medios de comunicación desembarqué en el sector del lujo y rápidamente me cautivó. Mi mayor logro sería que los lectores disfrutaran tanto leyendo como yo lo hago escribiendo"