Un coche de lujo es mucho más que un vehículo funcional. Es en sí toda una experiencia. En la que, más allá de ser un exquisito trabajo de ingeniería hecho a mano, intervienen todos los sentidos. Desde el ruido de su motor o el diseño de su forma, hasta el tacto y el olor de los materiales utilizados. Unas sensaciones que la firma Rolls Royce ha querido potenciar añadiendo a sus vehículos su propia fragancia, Rolls Royce Scent.
Se trata de un nuevo concepto de fragancia inmersiva, que de momento se presenta en el producto estrella de la marca, el modelo Phantom. Un aroma creado por expertos perfumistas internos del Bespoke Collective de la firma. Que cuenta con una tecnología patentada que libera sutilmente la fragancia para tener una experiencia duradera.
No se trata de una simple fragancia con la que identificar al Rolls Royce Phantom. Sino que es el resultado de un cuidado estudio en el que se han tenido en cuenta todos los materiales seleccionados para la fabricación del vehículo. Desde el cuero, las maderas, las lanas y otras superficies, así como las lacas y tintes utilizados. Materiales no solo de altas cualidades visuales y táctiles, sino también con un aroma determinado. Cuyo conjunto crea una mezcla de aromas en el interior del coche que es única, caracterizada por una rica nota de cuero.
Partiendo de ahí, complementando los ricos aromas de los materiales utilizados en los Rolls Royce, se ha creado una fragancia para enriquecer la experiencia sensorial dentro del automóvil. Una fragancia hecha a medida, que combina notas de amyris, madera de cedro, palo de rosa e iris. Mientras la madera de cedro aporta una complejidad calmante y delicadamente especiada, y el palo de rosa añade una nota seca y ligeramente dulce, el iris introduce una cualidad floral pero terrosa, complementada por los matices amaderados y ahumados del amyris.
Su liberación tampoco es habitual. No se trata de un simple difusor o ambientador al uso, sino que se ha desarrollado un sistema de liberación de fragancia patentado, que garantiza que la fragancia se libere en dosis delicadas y adecuadas para una experiencia sensorial duradera y sofisticada.
Hasta conseguirlo, se realizaron diferentes pruebas para que el aroma brindara la experiencia que se pretendía. Se hicieron análisis de la fragancia Rolls Royce Scent en condiciones estáticas y dinámicas, así como en una variedad de temperaturas y humedades extremas. Hasta más de 30 versiones, antes de que los expertos de Rolls Royce estuvieran convencidos de que la fragancia cumpliría con los exigentes requisitos de los clientes de la firma.
Sin duda, una cualidad más a añadir a un vehículo de lujo en el que cada detalle ha estado meticulosamente cuidado para satisfacer los estándares de sus exigentes propietarios. Un nuevo aroma que contesta a la pregunta que quizás alguna vez se haya hecho, ¿a qué huele un Rolls Royce? Ahora ya sabemos que a amyris, cedro, palo de rosa y a iris.
© Imágenes Rolls Royce
MARTA PARAREDA
"Periodista, especializada en Comunicación de Moda. Tras pasar por varios medios de comunicación desembarqué en el sector del lujo y rápidamente me cautivó. Mi mayor logro sería que los lectores disfrutaran tanto leyendo como yo lo hago escribiendo"